1993
Hallazgo de un muro submarino en Canarias
capitulo I
En Junio de 1993 todos los noticieros canarios, desde Radio Nacional de España hasta los principales periódicos, publicaron una noticia que alarmó a más de uno: "Hallazgo de un muro submarino en Canarias. ¿Restos de la Atlántida?". Lo curioso es que nunca más se volvió a hablar de dicha noticia.
El siguiente y extenso artículo, del cual tomo los puntos más relevantes, fue escrito por Carmen Pérez de la Hiz y publicado en la revista Espacio y Tiempo (número 29 mes de Julio), dirigida por el prestigioso, y ya desaparecido, Jimenez del Oso.
La Atlántida es, sin duda, el más grande y trascendente enigma de la Historia y, sobre todo, la ubicación del legendario continente que se sumergió de improviso constituyen una imponente incógnita que de vez en cuando cobra vigor cuando se descubren en los fondos marinos restos cuyo origen es difícilmente explicable.
Y así sucede ahora ante el hallazgo muy cerca de las costas canarias, y a escasa profundidad, de lo que parecen ser elementos de un muro de piedra que debió formar parte de una construcción. Con el sorprendente descubrimiento se ha vuelto a hablar de La Atlántida, de la que, se dice, puede ser un vestigio. El asunto es apasionante y razón suficiente para que "Espacio y Tiempo" lo someta a la inteligencia y consideración de sus lectores.
Recientemente salió a la luz una noticia explosiva protagonizada por la "Confederación Atlántida" cuyos miembros, en su infatigable lucha por rastrear las huellas ignoradas de su pasado histórico (que sin duda les llevarán a un encuentro con sus verdaderos orígenes, se han visto recompensados nuevamente por otro soprendente descubrimiento: los restos sumergidos de un muro. De este sensacional hallazgo me informa telefónicamente, nada más producirse, el presidente y creador de la Confedereación, D. Emiliano Bethencourt, y ante su promesa de concedernos la primicia -deferencia que agradezco enormemente-, me traslado inmediatamente a la isla de Tenerife, donde ya en su casa y junto a Félix R. Rojas y varios miembros de la Confederación Atlántida, charlamos sobre este y otros apasionantes temas. Hasta aquí la primera parte del artículo de Carmen Pérez.
Ampliación del artículo:
Hacia el año 350 a.C., Platón escribió en sus diálogos tardíos, Timeo y Critias sobre una la existencia de una gran isla – más grande que Libia y Asia juntas – más allá de las Columnas de Heracles, actual Estrecho de Gibraltar. Esta isla ocupaba gran parte de lo que hoy conocemos como el Océano Atlántico. En los Diálogos Critias, discípulos de Sócrates narraba una historia que escuchó a su padre cuando era un niño y que éste a su vez escuchó de Solón, el gran legislador ateniense y uno de los Siete Sabios de Grecia.
El Timeo y Critias narra el viaje que Solón, realizó a Egipto, donde oyó a los sacerdotes de Sais la historia de la isla de Atlántida. Los sacerdotes le explicaron que la historia se remontaba al principio de los tiempos, cuando los dioses reinaban sobre la tierra y se dividieron el mundo para que cada uno de ellos lo gobernase. Poseidón, el dios del mar, recibió la isla que llamó Atlántida, eligió a una mujer mortal, Clito, y comenzó una dinastía de reyes que gobernarían durante siglos. Tuvieron cinco pares de gemelos y a cada uno le dio un reino. Al mayor de ellos, Atlas le dio la ciudad que llevaba su nombre y que tendría poder sobre las otras nueve. Así, explicó, se fundó la ciudad de Atlántida, dentro del continente que lleva su mismo nombre.
La historia, que Critias relata como verdadera, se remonta a nueve mil años antes de la época de Solón para contar como los atenienses detuvieron el avance del imperio de los atlantes y que al poco tiempo de la victoria ateniense, la isla desapareció en el mar a causa de un terremoto y una gran inundación.
En el Timeo, Critias habla de la Atlántida en el contexto de un debate acerca de la sociedad ideal; cuenta como llegó a enterarse de la historia y cómo fue que Solón la escuchó de los sacerdotes egipcios; refiere la ubicación y la extensión de sus dominios en el Mar Mediterráneo; la heroica victoria de los atenienses y, finalmente, como fue que el país de los atlantes se perdió en el mar. En el Critias, el relato se centra en la historia, geografía, organización y gobierno de la Atlántida, para luego comenzar a narrar cómo fue que los dioses decidieron castigar a los atlantes por su soberbia. El relato se interrumpe aquí quedando la historia sin concluir.
Para la mayoría de los pensadores de la antigüedad se trataba de una narración verídica, de una historia basada en sucesos o acontecimientos reales, aunque el debate generado no fue más allá de sostener o negar la realidad histórica de la Atlántida.
La precisa descripción de los textos y el hecho de que se afirme reiteradamente que se trata de una historia verdadera ha llevado a que se hayan buscado posibles ubicaciones para la isla. A pesar de ello, la mayoría de historiadores de la actualidad opinan que la Atlántida, tal y como la describe Platón, nunca existió.
CONTINUARÁ
NOTA: No hace falta indicar que las imágenes que ilustran este primer capítulo corresponden a la imaginería popular.
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1 comentario:
Hola. Bonita la historia, me gustaría publicar en una web que se utiliza para promocionar el turismo de Canarias.
Se estima publicarlo entre el 5 y 15 de Septiembre 2012. Por favor si no estuviese de acuerdo, hágamelo saber.
eldiariodelatierra@gmail.com
La página en la que se verá esta publicación es: www.eldiariodelatierra.com de momento estará en español y en breve se traducirá a otros idiomas.
Si más,
Un cordial Saludo
El DiarioTierra
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